Todavía con la resaca de las fiestas, empecé a planificar esta tarta para el cumpleaños de mi
sobrino Sergio, que le encantan los coches, y se recorre media España en busca de rallys, y además
el número 25, que son los años que ha cumplido, con sus montañas y su nieve, su lago, y hasta su cabrita en la montaña, y como no podía faltar: el toro de Osborne... jejeje..